Recientes pruebas de rendimiento del Snapdragon 8 Gen 4 indican que su rendimiento supera al de los procesadores de Apple.

Eduardo Ruiz 6 agosto, 2024

Qualcomm está a punto de lanzar su próximo chipset insignia, el Snapdragon 8 Gen 4, en los próximos meses. Este próximo sistema en chip (SoC) ha generado una considerable expectación, especialmente debido a la decisión de Qualcomm de reintroducir núcleos personalizados en su diseño. Los núcleos personalizados, denominados Oryon, también están presentes en la serie Snapdragon X destinada a portátiles ARM, y se espera que mejoren tanto el rendimiento como la eficiencia energética. Insiders de la industria sugieren que el próximo chip A18 Bionic de Apple, que alimentará la serie iPhone en 2025, podría tener dificultades para competir con el Snapdragon 8 Gen 4 en términos de rendimiento.

Filtraciones recientes de benchmarks indican que el Snapdragon 8 Gen 4 ha sido listado bajo un nombre genérico en la base de datos de Geekbench. El SoC logró un puntaje de un solo núcleo de 2,884 puntos, posicionándose muy cerca del actual A17 Pro Bionic de Apple en esa área. Sin embargo, es en el rendimiento multi-núcleo donde el Snapdragon 8 Gen 4 muestra una gran fortaleza, con un puntaje de 8,840 puntos, superando claramente al último SoC insignia de Apple.

Además, se anticipa que el Snapdragon 8 Gen 4 contará con una unidad de procesamiento gráfico (GPU) más avanzada. La GPU actual del Snapdragon 8 Gen 3 ya supera a las ofertas de Apple, y las mejoras en el próximo modelo podrían ampliar aún más esa brecha. Se rumorea que Apple planea una mejora del 50% en el rendimiento de su GPU móvil, lo que hace que la comparación de rendimiento entre ambos chips sea especialmente interesante en el momento de su lanzamiento. Es importante señalar que los rumores indican que la actualización de la CPU del A18 Bionic sobre el A17 Pro podría ser mínima.

Aunque se probó previamente un prototipo del Snapdragon 8 Gen 4, informes sobre frecuencias de CPU inusualmente altas suscitaron algunas preocupaciones. Los últimos resultados de benchmarking son probablemente la representación más precisa de las capacidades de rendimiento del chip, sugiriendo una mejora significativa sobre modelos anteriores mientras mantiene un equilibrio entre potencia y eficiencia.

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