iQOO Q3 estrena potente chip gaming que desbloquea raytracing completo en móviles

Eduardo Ruiz 5 octubre, 2025

iQOO Q3 es el nombre del próximo chip gaming desarrollado internamente por iQOO, que se lanzará junto al esperado smartphone iQOO 15. Este procesador ha sido diseñado para superar las limitaciones de rendimiento y eficiencia energética que suelen presentar las GPU integradas en los SoC móviles convencionales. El anuncio destaca que el iQOO Q3 ofrece mejoras notables en la gestión de energía, permitiendo un avance doble en calidad visual y control del consumo durante el uso intensivo, un ámbito clave para partidas prolongadas en dispositivos móviles.

La compañía insiste en que el nuevo chip es capaz de reproducir efectos complejos de iluminación y reflejos en tiempo real, manteniendo bajo control la generación de calor y el gasto de batería. Esto supone un salto generacional para el gaming en móviles, puesto que hasta ahora los efectos visuales avanzados como el ray tracing eran limitados debido a su alto consumo. Además, el Q3 se destaca por su arquitectura híbrida, que complementa la GPU principal del SoC para distribuir mejor las tareas gráficas y asegurar una experiencia fluida.

iQOO Q3 y sus avances en ray tracing y arquitectura híbrida

El iQOO Q3 supone un avance importante en la ejecución de ray tracing, que simula en 3D el comportamiento realista de la luz, un proceso tradicionalmente muy costoso en términos de consumo energético. Mientras las soluciones actuales pueden consumir cientos de miliamperios por cuadro, el Q3 logra reducir ese consumo hasta solo tres miliamperios por frame. Esta reducción no solo es significativa sino que abre la puerta para implementar ray tracing en tiempo real de forma viable en dispositivos portátiles, acercando la calidad gráfica móvil a la de títulos de PC de gama alta con entornos abiertos y detallados.

Por otro lado, la integración híbrida del Q3 con la GPU principal ayuda a evitar caídas de frames y tirones durante escenarios gráficamente exigentes. Al descargar ciertas tareas específicas a este coprocesador, la carga se distribuye de forma más eficiente, lo que se traduce en tasas de frames estables y un consumo de energía más constante, mejorando la experiencia general del usuario en juegos pesados. Este método rompe con la dependencia exclusiva del SoC para todo el procesamiento gráfico, un enfoque que se adapta a las exigencias actuales del gaming móvil.

Fabricado con el proceso de semiconductores de TSMC, el iQOO Q3 mejora su rendimiento un 60% respecto a su predecesor, eleva la eficiencia energética en un 40% y aumenta la potencia en computación AI hasta en un 400%. También incorpora un 50% más de caché, algo que favorece la entrega continua y fluida de frames en situaciones demandantes. Estas cifras reflejan un claro compromiso de la marca por desarrollar un chip propio que optimice tanto la potencia gráfica como la autonomía, dos aspectos clave para el público gamer que busca dispositivos de alto rendimiento.

Para aquellos interesados en novedades tecnológicas y análisis de hardware, se recomienda mantenerse atentos a futuras actualizaciones sobre esta plataforma y el nuevo smartphone que llegará próximamente al mercado. La evolución del iQOO Q3 está marcando un antes y un después en la relación entre rendimiento gráfico avanzado y eficiencia energética en el ámbito móvil.

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