Xiaomi ha confirmado que está desarrollando un chip de nueva generación para sus smartphones, dando continuidad a la base establecida con el XRing 01, que debutó en mayo exclusivamente en el Xiaomi 15S Pro. Este procesador, fabricado con tecnología de 3 nm, logró resultados destacados en benchmarks, superando los tres millones puntos en AnTuTu, situándose a la altura de competidores consolidados en el sector. La apuesta de Xiaomi por sus propios SoC refleja la intención de posicionarse en la gama alta con un producto que combine rendimiento y eficiencia, marcando un paso importante en su estrategia tecnológica.

Estrategia y desarrollo de Xiaomi en semiconductores

Xu Fei, vicepresidenta de Xiaomi, explicó en una entrevista que, a diferencia de otros gigantes como Apple, la compañía no lanzará un nuevo sistema en chip (SoC) cada año. Xiaomi reconoce su condición de principiante en el área del diseño semiconductores y apuesta por una progresión pausada y a largo plazo. Su prioridad será ofrecer un rendimiento premium y una experiencia de usuario sólida antes que acelerar las actualizaciones periódicas. Según sus previsiones, el negocio de desarrollo de SoC requerirá al menos una década para alcanzar el punto de equilibrio, lo que indica la dimensión y la ambición del proyecto.

El desarrollo del chip que podría llamarse XRing 02 confirmaría el compromiso de Xiaomi con la expansión en el mercado global de smartphones de alta gama. Además, la firma ha anunciado una inversión mínima de 50.000 millones de yuanes (unos 6.500 millones de euros) en el desarrollo interno de semiconductores durante los próximos diez años. Esta cifra refleja la importancia estratégica que Xiaomi concede a su proyecto de crear chips propios que respondan a sus necesidades técnicas y de mercado.

A pesar de los avances en su propio diseño de chips, Xiaomi mantendrá su colaboración con fabricantes tradicionales como Qualcomm y MediaTek, socios que le han suministrado procesadores durante los últimos 15 años. Actualmente, la serie Xiaomi 17 cuenta con Qualcomm Snapdragon 8 Elite Gen 5, mientras que la línea Xiaomi 15T utiliza procesadores de MediaTek. Xu Fei ha señalado que Xiaomi seguirá una estrategia dual: utilizar chips de terceros para algunos modelos y, al mismo tiempo, integrar selectivamente sus propios SoC en otros, garantizando estabilidad, rendimiento y sin poner en riesgo las relaciones construidas con sus socios.

Este enfoque equilibrado muestra que Xiaomi es consciente de la complejidad que supone el diseño y fabricación de semiconductores, así como de las dinámicas del mercado global. La apuesta es moderada pero decidida, con la vista puesta en crecer dentro de un sector dominado por competidores con décadas de experiencia. Así, Xiaomi adapta su estrategia para consolidar su posición en un entorno altamente competitivo a medio y largo plazo.

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