Google está enfrentando problemas derivados de un lanzamiento problemático de la actualización Wear OS 5. La compañía anunció que detuvo la distribución de la actualización por aire (OTA) el 26 de septiembre tras recibir informes de usuarios, incluido el periodista Richard Lawler, que señalaban que sus dispositivos Pixel Watch 1 y 2 se volvieron inoperativos, quedando atascados en una pantalla en blanco como consecuencia del nuevo software. Esta situación ha generado inquietud entre los usuarios, quienes esperan una solución efectiva.

En consonancia con los reportes anteriores, Google ha indicado que tiene la intención de reiniciar el despliegue de Wear OS 5 para los modelos afectados de Pixel Watch más adelante en este año. La pausa en la actualización demuestra el compromiso de la empresa por resolver los problemas y garantizar una experiencia estable para todos antes de reanudar el lanzamiento de esta nueva versión.

Soluciones para dispositivos inoperativos tras Wear OS 5

Para aquellos cuyos dispositivos se han quedado inutilizables a causa de la actualización—una situación comúnmente denominada “bricked”—existen estrategias recomendadas de solución de problemas. La página de soporte de Google ofrece pautas detalladas para revivir un dispositivo congelado, incluidas instrucciones sobre cómo realizar un restablecimiento de fábrica a través del modo Fastboot cuando los ajustes estándar no son accesibles. Esto proporciona una vía de esperanza para los usuarios que han quedado varados por la actualización.

Por otro lado, los usuarios de Pixel Watch que todavía funcionan correctamente pueden beneficiarse de una nueva característica lanzada por Google. Esta mejora permite a los usuarios recibir una notificación en sus smartphones una vez que su reloj ha completado la carga, un añadido práctico que no requiere que se active la actualización Wear OS 5. Esta funcionalidad contribuye a una mejor experiencia de usuario mientras se espera la solución definitiva de los problemas que han surgido.

Este episodio pone de relieve la tendencia de los problemas de software que las empresas tecnológicas suelen encontrar, subrayando la importancia de realizar pruebas rigurosas antes de desplegar actualizaciones importantes para los consumidores. Los usuarios deben permanecer atentos y utilizar los recursos disponibles de Google mientras aguardan el reanudo de la actualización de Wear OS 5 más adelante en el año.

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