La transición de Google a los chips Tensor en su serie Pixel ha dado como resultado, en gran medida, resultados positivos, a pesar de algunas imperfecciones. Una de las principales preocupaciones manifestadas por los usuarios ha sido el rendimiento de los chips de Google en pruebas de referencia. Este problema persiste con el Tensor G4, ya que la compañía enfatiza que su diseño se centró principalmente en mejorar el uso en el mundo real en lugar de competir en benchmarks sintéticos.

En 2021, Google tomó la decisión de alejarse de los procesadores Snapdragon de Qualcomm con la presentación de la serie Pixel 6, optando por un chip Tensor de fabricación personalizada, orientado a facilitar “avances en inteligencia artificial” y alinearse con los objetivos de la compañía para la marca Pixel. A medida que nos acercamos a 2024, esta énfasis en aplicaciones prácticas continúa siendo crucial.

A pesar del escrutinio que rodea al chipset Tensor de cuarta generación, especialmente por su incapacidad de superar a los últimos dispositivos Snapdragon, Google parece estar imperturbable. Durante el reciente evento “Made by Google”, la empresa presentó el Tensor G4 como su iteración “más rápida y eficiente” hasta la fecha, subrayando que está diseñado para mejorar actividades cotidianas como la navegación web, la transmisión y la fotografía, con un impacto mínimo en la batería.

En una conversación con Financial Express, Soniya Jobanputra de Google reiteró que la filosofía de diseño detrás del chip Tensor evita deliberadamente priorizar los logros en benchmarks. En su lugar, el enfoque está en crear un chip que aborde de manera efectiva los casos de uso específicos de los usuarios de Pixel.

Jobanputra destacó las mejoras en el rendimiento de las aplicaciones, señalando que el Tensor G4 está optimizado para la multitarea y la capacidad de respuesta de las aplicaciones. Además, las colaboraciones con DeepMind han integrado capacidades de inteligencia artificial, dando lugar a un sistema que, según se informa, es tres veces más eficiente en el procesamiento de tareas de IA en el dispositivo en comparación con el Pixel 8 Pro.

Por otra parte, el nuevo módem Exynos 5400 integrado en los dispositivos promete una mejor eficiencia energética y apoya la nueva función de SOS por satélite de Google. Aunque no se divulgó más información sobre el Tensor G4, es evidente que Google sigue comprometido en el desarrollo de un chip diseñado específicamente para sus productos Pixel.

De cara al futuro, continúa la especulación sobre lo que ofrecerá el Tensor G5, ya que informes sugieren que la próxima iteración de Google contará con un diseño completamente personalizado producido por TSMC. Esta transición podría conducir a un rendimiento y eficiencia mejorados, permitiendo a Google una mayor libertad creativa con los futuros desarrollos de chips.

La serie Pixel 9 de Google, que utiliza todos el Tensor G4, ya está disponible para preordenar, con precios que comienzan en 799 € (alrededor de 999 $).

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